"Camino Infinito": Un Sensorium de Texturas, Colores y Deseos
Cada niño es un artista. El problema es cómo seguir siendo artista al crecer.
— Pablo Picasso

PH Y EDIT: MARINÉ.
Infancias que trazan caminos de arte
En una semana transformadora, la muestra Camino Infinito supo convertir la creatividad de 630 niñas y niños en un espacio de sensibilidad y expresión artística. Coordinada por @valiguidalevich_, directora artística de M.A.I.E (Museos. Artistas. Infancias. Escuelas), y sostenida por la dedicación de docentes, familias y comunidades, esta propuesta reunió a los Distritos Escolares 2, 7 y 14 de la Ciudad de Buenos Aires para celebrar el arte en su estado más puro: el de las infancias.

Desde el lunes 4 hasta el 12 de noviembre, el público fue invitado a recorrer una galería que no solo mostró sus obras, sino que ofreció un universo multisensorial donde las creaciones transgredieron todas las técnicas tradicionales. Niñas y niños no solo pintaron, sino que tejieron, hicieron collages y plasmaron sus mundos imaginarios, desafiando los límites del arte con perspectivas frescas y auténticas.

Un arte que se deja hacer
Los trabajos expuestos no respondieron a la lógica de "lo que debe ser". Más bien, revelaron aquello que surge cuando el HACER triunfa sobre el SER: el gesto libre, el trazo instintivo, el juego sin límites. Cada obra se transformó en un "sensorium" donde el espectador no solo observa, sino también siente, toca y reflexiona.
Sin duda, la muestra fue un recordatorio de lo que decía Hubert Godard:
"El cuerpo guarda la memoria de lo que no podemos nombrar."
En este contexto, el arte de las infancias se convirtió en un archivo vivo de sensaciones y pequeñas historias que vibraron entre risas, colores y sorpresas. Todo ello resonó con las palabras del gran Gilles Deleuze: "Crear es resistir", un acto donde las infancias no solo expresaron, sino que desafiaron las estructuras predefinidas, (re)creando, a través de sus movimientos, trazos y (des)pliegues, el mundo tal como lo conocemos.

El poder colectivo del arte
Camino Infinito no fue solo una exposición; fue, más bien, un acto pedagógico-artístico donde las preguntas y el asombro se convirtieron en protagonistas. Las niñas y los niños no fueron limitados por la rigidez de las respuestas, sino que exploraron desde la libertad del descubrimiento. Un enfoque que evoca a Paul Klee, quien afirmaba:
"El arte no reproduce lo visible. Hace visible."
Este "hacer visible" trascendió las paredes de la galería, transformándose en un acto político: una declaración de que las infancias no solo habitan el mundo, sino que lo crean.
Experiencias para llevar
La experiencia no terminó al salir del espacio. Los y las visitantes tuvieron la oportunidad de crear su propio camino como artistas, encontrando en la muestra un lugar para explorar y desarrollar su creatividad. Esta posibilidad de apropiarse del proceso creativo resonó con el espíritu mismo de la muestra: un arte que invita, que permite ser y que nos reconecta con la génesis de nuestros imaginarios.
Una crítica extasiada
Esta crítica en artes quedó extasiada ante el despliegue de hermosura, significado y metáforas danzantes que (nos) propuso Camino Infinito. Un recordatorio de que el arte no debe obedecer, sino permitir. Permitir que manos pequeñas cargadas de historia nos enseñen que el acto artístico es, en definitiva, un acto de amor, un lugar donde los códigos de "lo que debe ser" son reemplazados por el caos fecundo de "lo que puede ser".
Gracias, Camino Infinito por recordarnos que el arte de las infancias no solo se observa, se habita.
Camino Infinito en Galería de Arte Palermo H
🗓️Desde el lunes 4 hasta el 12 de noviembre.
La Galería está abierta de lunes a viernes de 11 a 18hs y los sábados de 10 a 13hs.
📍Dir.: Tucumán 712, CABA.
Una muestra tan necesaria como imprescindible.