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Mariné Amestoy

Crónicas de escritura, política(s) de encuentro y la búsqueda (en la voz).


 


Cómo citar este artículo.

Mariné Amestoy (2024). Crónicas de escritura, política(s) de encuentro y la búsqueda (en la voz). Cuadernosdedanza.com.ar ISSN22508708. Publicado: 2 de enero.









 

Hay algo que nos une que nos llama al encuentro y, con ello, al calor de la reflexión que, a su vez, nos devuelve al encuentro (en una rueda que nos pone de pie entre procesos relacionales sociales, culturales y políticos). ¿Es esta una condición (in)nata desde que el hombre fue homo sapiens y aprendió que el conjuntar(se) nos vuelve indestructibles, difíciles de persuadir o dominar?, forma hercúlea en su masa colectiva.


La cita que unió, esta vez, a esa/esta masa colectiva (hercúlea) de la que hablo, fue en LA LIBRE – COOPERATIVA DE LIBROS Y CULTURA, el domingo 30 de julio de 2023 a las 17 horas, bajo el título de Escrituras políticas y políticas de escritura, coordinado por Bel Eiff, editora de 2 (DA) CUADERNOS DE DANZA y dos integrantes del colectivo La liga tensa. Bel, ofició de presentadora, desde su nuclear-lugar en Segunda dando la bienvenida a CUADERNOS DE PROTESTA que, (re)leyendo luego en su WEB puedo entrever algo de lo que significó ese “acá estamos” o “por esto” y es lo que, posterior a las dos horas de charla compartida, puede interpretarse como un manifiesto moviente, sintiente, de márgenes y centros eróticos de lucha o, porque no, como masa social que se emplaza y desplaza, cambiando, así, las existencias (¿condiciones?) corporales individuales (se quiera o no, se busque o no): 


 


Esta no es una investigación objetiva. Investigamos para salir a la calle, para alimentar las luchas en las que creemos y con las que buscamos cercanía, sabiendo que hay acontecimientos que nos cambian (y nos han cambiado) la vida. Venimos acá a compartirte lo eróticas que nos resultan las manifestaciones. Nuestros cuerpos están empapados de marchas y el tuétano de nuestros huesos convertido en lumbre. Marchamos y escribimos, a veces estos dos caminos se cruzan, a veces no. En estos cuadernos deseamos sumarnos a la protesta desde la escritura y la imagen (...)


(fragmento texto de presentación tomado de su página web) 



 

Esta es (toda) una declaración que se ve reunida en los seis Cuadernos de la protesta, de insignia subversiva, anche profundamente poética, que promete un imaginario en donde el alma parece estar puesta en la dermis de quienes lucharon (nosotrxs, vosotrxs, ellxs), por un mundo“cordélicamente” mejor (que es decir casi nada, pero que no deja de ser algo) logrando mover a alguien y, de este modo, vernos reunidxs para seguir haciendo-danzando con-junto a él-ella, a nosotrxs y a ellxs. 


 

Principios de imagen(es), altos en la voz y silencios mínimos.


La figura de la protesta es un vehículo que rompe con el deber ser, siendo paráfrasis corpórea para poder ser, luego, comprendida como una enunciación simple. La protesta es un motor y, como tal, lleva al cuerpo a la pregunta y la respuesta al cuerpo en un juego semántico y dinámico, mas no lúdico. Sigue siendo un modo para buscar estrategias colectivas que nos con-junten y aúnen. Ahora bien, ¿cómo pensar esas estrategias sin dejar de lado la inmensidad íntima?

Estamos ahí, esperando escuchar, esperando ver, esperando sentir(nos) juntxs en las preguntas que se apelotonan en los asientos y sentidos. Somos cuerpo(s) que, con su sustancia e identidad óseo-muscular, piden pista para salir del tedio cartesiano. Hay una clara sensación de que, ¿luego?, de la pandemia ("¿d.P?") se (nos) ha vuelto una necesidad la #salidacolectiva y es desde y hacia allí donde volvemos para buscar el calor que nos fue arrancado brutalmente. 



 



La liga tensa y Cuadernos de Danza nos congregan a pensar la idea de manifestación pasada-presente-futura, a ponerle nombre a esas danzas y coreografías antes de la pandemia ¿“a.P”? STOP: ¿Se podrán empezar a poner en circulación discursiva acepciones así? ¿Aún hay danza de carácter social? ¿Cómo son y de qué tratan?, ¿hay protestas en la calle?, ¿qué tipo de protestas?, ¿seguimos bailando por nuestros derechos? Quizás no todo esté perdido, quizás podamos seguir haciendo política con nuestras danzas (¿o acaso es indisociable una cosa de la otra?) desde otros sitios y/o espacios, pero ¿cuáles? ¿Vale la pena aún bailar cuándo el mundo se cae a “cachos” ?, sería apresurado decir que sí, pero lo hago: sí, lo vale y voy más lejos: es menester hacerlo. El tema es el cómo o el desde qué espacio o lugar.


 

Se trata de abrir (más) lugar dentro y fuera del mundo. Se trata de pensar/actuar.


La charla discurre con fluidez, con detenimientos y pausas necesarias para pensar en lo que fuimos y somos, esa dualidad que nos apura, pero no nos alcanza. ¿Por qué pensamos todo en términos duales? Me repito “abandonar el dualismo cartesiano” tantas veces como me es posible hacerlo, para ocupar el borde, curvas y márgenes de todo-eso-ahí llamado librería que nos alberga. Abandonar el dualismo cartesiano para que podamos ser un bloque de capacidades y herramientas que nos logre (de)construir. Volver a hacer, se trata de volver a pensar/actuar. ¿Seré demasiado optimista?

Es probable, pero estos encuentros me visten de gasa, aunque mi actitud sea completamente audaz. Son tiempos difíciles, sí, lo sabemos. Para todo, también lo sabemos. Por eso se hace imprescindible Pensar con-mover (parafraseando a Marie Bardet), poner en tensión las certezas sociales (porque no las hay), hacernos de cuerpo(s) para encontrar calor, hogar, ¿un nuevo comienzo? Sí, tal vez sea demasiado, pero es lindo imaginar en que algo bueno o, al menos, nuevo puede llegar a surgir de estos y otros encuentros que celebro y agradezco, sin solemnidad. 




 


 

Este texto es una bitácora de la charla-debate Escrituras políticas y políticas de escritura, organizada en La libre, cooperativa de libros y cultura, en conjunto con 2 DA En Papel Editora, Cuadernos de Danza ISSN 22508708 y La Liga Tensa, el domingo 30 de julio a las 17 horas en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. 

 

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Bio

Ella es Mariné o Marina Amestoy, directora y fundadora de Revista Mariné.

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